Niko Topuzi, un albanés que reside en Santorini, Grecia, tiene un profundo amor por Venezuela y su rica historia. Recuerda la belleza y prosperidad del país en los años 70, cuando era una joya de América Latina, atrayendo a personas de todos los rincones del continente.
Esta fascinación por su esplendor lo llena de una mezcla de admiración y tristeza al ver la situación actual de Venezuela, deseando que su gente pueda vivir nuevamente con paz y prosperidad.
Su amor por Venezuela se profundiza aún más por sus propias experiencias como emigrante desde los 15 años. A lo largo de sus viajes, ha conocido a muchos venezolanos que también han tenido que dejar su hogar, encontrando en ellos una resonancia especial.
Las historias de los venezolanos en el extranjero siempre han despertado su interés y simpatía, a pesar de las dificultades que enfrenta el país.
A menudo se le pregunta por qué siente tanto amor por Venezuela, y su respuesta es simple: el amor es un sentimiento que no siempre puede explicarse con palabras.
Caption:
Para @nikotopuzi, su aprecio por Venezuela es muy personal, arraigado en las historias de su gente y en su propio camino como emigrante.
Como parte de ese aprecio, abrió vacantes exclusivamente para los venezolanos en sus dos restaurantes y hoteles, ubicados en Santorini, Grecia.
Contenido patrocinado por @nikotopuzi.