El Estadio de la Ciudad Universitaria fue escenario para que Tiburones de La Guaira rompiera una «sequía» de 11 años sin trascender a una final de la Lvbp, luego de imponerse ante Tigres de Aragua 8 a 5 y así inscribir su nombre para medirse a Los Leones del Caracas a partir del próximo martes 24 en una final que promete emociones vibrantes.
Un despliegue ofensivo de los litoralenses que incluyó cuatro vuelacercas en el encuentro. El primero de ellos conectado por Franklin Barreto en el 1er inning. Seguido por otro palazo de Balbino Fuenmayor y Ángel Reyes en la tercera entrada, ante el pitcheo del abridor Cristofer Molina. E incluso, en el cuarto tramo Maikel García, haría lo propio ante los lanzamientos del relevista Anhelo Palumbo para que los comandados por el Manager Henry Blanco se pusieran a ganar 6 a 3.
El conjunto tigrero, más allá que no tenía aspiraciones de optar por ir a la final, dio una muestra de como está forjado. Garra y tradición en nuestra liga de béisbol profesional, además de muestra de competitividad. En la tercera entrada anotaron la primera rayita, producto de un toque de bola de Johan López, el cual avanzó hasta la antesala debido a un error en el tiro del tercera base Eire Adrianza. Luego con fly al right, Carlos Tocci, permitía esa primera carrera para los aragueños. En el cuarto episodio los dirigidos por Wilfredo Romero fabricarian par de anotaciones adicionales. Hits conectados por José Martínez, Dennis Ortega y Carlos Duran, para que Johan López con cañonazo al jardín central, impulsara dos carreras. Carlos Rivero la botó en el 5to e impulsó a Alexi Amarista que había recibido boleto. Fueron las cinco carreras que sumó la novena rayada en todo el cotejo.
El relevista Arnaldo Hernández (3-0) se apuntó el triunfo. Toleró par de incogibles con igual número de ponches en dos entradas de labor. Perdió Cristofer Molina (0-1). En 2.1 innings de actuación. Le fabricaron 5 rayitas, producto de 5 batazos productivos, (lo que incluyó 3 jonrones). Concedió 2 boletos y ponchó a un rival. Por su parte, Edubray Ramos tuvo los méritos para anotarse su primer salvamento.
Alberto Hidalgo.
